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COVID 19 Nuestra curva de contagios y la del Mundo…

…ambas piden la misma respuesta ¿Cuándo bajan?

Publicado: 2021-02-26

Hoy queremos hacer un ejercicio muy simple, casi visual, para nada basado en las matemáticas o estadísticas, sin modelo proyectivo alguno.

Se trata de traer dos curvas y, observándolas, ver que nos dice cada una de ellas, individualmente y comparándolas. A partir de ello, identificaremos las preguntas o temas que quedan pendientes.

El indicador de ambas curvas es el mismo: La evolución de los promedios móviles diarios de contagios (tomados en base semanal) de:

• La Pandemia en el Mundo en su conjunto.

• La Pandemia en el Perú.

En el Mundo

Comencemos con la curva global, observando cual ha sido su comportamiento:

De la evolución de la misma se pueden destacar los siguientes elementos relevantes:

• La curva (ver el gráfico de abajo) no ha tenido un crecimiento continuo, sino más bien momentos de crecimiento, seguidos de momentos de estabilización o estancamiento del mismo, configurando a lo largo de su desarrollo, tres mesetas: aproximadamente entre abril y Junio la primera, entre agosto y octubre la segunda y entre noviembre y enero la tercera.

• Inicialmente, al llegar a cada una de las cumbres, pensábamos ingenuamente confiados, que sobrevendría el descenso, el cual no llegaba y, por el contrario, se iniciaba una nueva etapa de crecimiento.

• La tercera de las mesetas es la más alta e irregular, con un fuerte hipo ascendente al final.

• Sin embargo, después de ella, por primera vez se inicia un descenso claro y prolongado de la curva.

• Dicho descenso, en los últimos días ha tendido a horizontalizarse, insinuando una cuarta meseta, esta vez en la ladera oriental de la cordillera, posicionándose en un nivel cercano al de la segunda meseta, lo cual podría insinuar una cierta simetría entre este descenso y el ascenso previo.

A partir de lo antes mencionado, surgen más dudas que certezas. Los expertos tendrían que explicarnos si esto pudiera interpretarse como el inicio del declive de la pandemia a nivel mundial, con no se sabe cuántas mesetas en la bajada o si, por el contrario, puede a nivel global venir un nuevo ascenso de la curva.

New York Times

En el Perú

En el gráfico siguiente, se puede apreciar la evolución del promedio de contagios diarios en nuestro país, que a nuestro entender muestra la presencia de tres olas: aproximadamente entre mayo y Junio la primera, entre agosto y octubre la segunda y a partir de enero la tercera.

Si nos acercamos a cada una de las dos primeras olas, veremos que el período que va desde que se inicia el crecimiento franco hasta que se inicia su descenso equivalente, es de entre 2 meses y 2 meses y medio. La tercera ola, tras su rápido ascenso inicial, muestra al momento un sube y baja dentro de una franja casi horizontal, que aún no comienza a descender. Si en ella se replica el antes mencionado período, el inicio del descenso en esta tercera ola podría darse a partir de mediados de marzo.

John Hopkins University

Comparando la del Perú con la del Mundo

Si observamos la evolución de ambas curvas (puestas esta vez juntas), constataremos que hay un desfase en los momentos de crecimiento de nuestra curva, respecto a los de la del Mundo. Así, nuestra primera ola de crecimiento de los contagios se da cuando en el Mundo, el crecimiento de los suyos ya estaba estabilizado en la primera meseta. Igualmente, nuestra segunda ola coincide temporalmente con la segunda meseta global, y nuestra tercera ola coincide con el descenso de la curva mundial y el inicio de la actual cuarta meseta global. Ello se explica por el camino que siguió la pandemia desde su origen: que se inicia en Asia, luego pasa a Europa y recién después llega a América. Ello nos da la ventaja de contar con una advertencia, a partir de lo que primero pasa en Europa, aunque no necesariamente ello se repetirá exactamente acá.

New York Times

John Hopkins University

A la luz de todo lo anterior, queda solo esperar que sobrevenga el consecuente descenso de nuestra curva y que el mismo sea realmente sostenible, en tanto logremos que se acelere y haga realmente eficaz el proceso de vacunación. A las autoridades les toca responsabilizarse de conseguir este logro, pues el costo de no alcanzarlo se paga con vidas.



Escrito por

Roberto Wangeman

Economista y músico


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